Mi implante dental se mueve: ¿qué puedo hacer?

¿Notas que tu implante dental se mueve al masticar o al tocarlo con la lengua? Si es así, es normal que te preocupes… pero también es importante que sepas que no siempre significa que el implante esté perdido.

Un implante bien integrado en el hueso no debe moverse en absoluto. Por eso, si percibes cualquier tipo de movilidad, lo mejor es actuar cuanto antes para identificar la causa y ponerle solución.

En este artículo te contamos por qué puede moverse un implante dental, qué hacer en ese caso y cómo prevenirlo para evitar complicaciones mayores.

¿Es normal que un implante dental se mueva?

La respuesta corta es no. Un implante dental que ha cicatrizado correctamente y se ha integrado bien con el hueso debe estar completamente fijo.

La movilidad, aunque sea leve, es una señal de que algo no va bien y necesita ser evaluado por el dentista cuanto antes.

Dicho esto, hay que diferenciar entre varios tipos de “movimiento”:

  • Si notas que la corona (el diente artificial) se mueve un poco, es posible que solo se haya aflojado el tornillo o que la prótesis esté desajustada. Es algo fácil de solucionar.
  • Pero si sientes que todo el implante (la raíz de titanio) se mueve dentro de la encía, entonces es probable que exista un problema más serio, como un fallo en la osteointegración o una infección (perimplantitis).

En ambos casos, lo mejor es no esperar ni automedicarse. Una revisión a tiempo puede evitar que el implante se pierda y ahorrar complicaciones mayores.

Causas comunes de la movilidad en implantes dentales

Cuando un implante se mueve, es fundamental identificar la causa concreta para poder actuar cuanto antes. Estas son las razones más frecuentes por las que un implante puede perder estabilidad:

1. Fallo en la osteointegración

La osteointegración es el proceso por el cual el implante se fusiona con el hueso. Si este proceso no se completa correctamente, el implante no llega a fijarse bien y acaba moviéndose.

Fallo en la osteointegracion

Puede deberse a múltiples factores como:

  • Falta de hueso o baja calidad ósea.
  • Enfermedades como la diabetes no controlada.
  • Carga excesiva o temprana del implante.
  • Hábitos perjudiciales como fumar.

2. Infección o periimplantitis

Una de las causas más serias es la periimplantitis, una infección de los tejidos que rodean al implante. Produce inflamación, pérdida de hueso y, si no se trata a tiempo, puede provocar la pérdida del implante.

Algunos síntomas que pueden acompañar esta infección son:

  • Encías rojas o inflamadas.
  • Sangrado al cepillarte.
  • Mal aliento persistente.
  • Dolor o sensibilidad en la zona.

3. Aflojamiento de la corona o la prótesis

En muchos casos, el implante en sí está bien fijado, pero lo que se ha aflojado es la corona (la parte visible del diente) o el tornillo que la sujeta.

Aunque no es una urgencia grave, sí necesita revisión cuanto antes para evitar daños mayores.

4. Bruxismo o fuerzas excesivas

Si aprietas o rechinas los dientes (bruxismo), especialmente durante la noche, puedes generar una sobrecarga sobre los implantes que, con el tiempo, los debilita.

En estos casos suele recomendarse el uso de férulas de descarga.

5. Traumatismos o golpes directos

Una caída, un accidente o un golpe fuerte en la boca también puede comprometer la estabilidad del implante, especialmente si aún no ha terminado de integrarse.

¿Qué hacer si tu implante dental se mueve?

Lo más importante: no lo dejes pasar. Si notas que tu implante dental se mueve, no es algo normal ni que se vaya a solucionar solo, así que es fundamental que acudas cuanto antes a tu clínica dental para que puedan revisarlo y actuar a tiempo.

Aquí tienes los pasos que deberías seguir:

1. No intentes apretarlo tú mismo

Aunque sientas que es “solo la pieza de arriba”, no intentes manipularla ni ajustarla por tu cuenta. Podrías dañar el implante, el tornillo interno o incluso provocar una fractura.

2. Pide una cita lo antes posible

Cuanto antes lo valore el profesional, más opciones habrá de salvar el implante o la prótesis. En muchos casos, un ajuste o una limpieza profesional puede ser suficiente si se detecta a tiempo.

3. Evita masticar por esa zona

Mientras esperas la revisión, intenta no ejercer presión sobre el implante afectado. Come por el lado contrario y evita alimentos duros o pegajosos.

4. Observa si hay otros síntomas

Inflamación, dolor, sangrado o mal olor pueden ser indicios de infección. Menciónalos en la consulta para que el diagnóstico sea más preciso.

Actuar rápido puede marcar la diferencia entre conservar el implante o tener que retirarlo. En nuestra clínica, tratamos este tipo de urgencias con prioridad para ayudarte a conservar tu sonrisa sin complicaciones.

Tratamientos y soluciones disponibles

El tratamiento para un implante dental que se mueve dependerá directamente de la causa que lo ha provocado.

Por eso, el primer paso siempre será una revisión clínica y radiológica para valorar el estado del implante, el hueso y los tejidos que lo rodean.

Estas son las soluciones más habituales según el diagnóstico:

✅ 1. Ajuste o reposición de la corona

Si el problema está en la prótesis (la parte visible), bastará con ajustar el tornillo, cementar de nuevo la corona o sustituirla si está dañada. Es una intervención sencilla y rápida.

✅ 2. Limpieza profunda y tratamiento de la periimplantitis

Si se detecta una infección leve o moderada, se puede tratar con:

  • Limpieza profesional del implante.
  • Aplicación de antibióticos locales o sistémicos.
  • Enjuagues antisépticos.
  • En casos más avanzados, puede ser necesaria una cirugía para limpiar la zona y regenerar el hueso perdido.

✅ 3. Retirada y sustitución del implante

Si el implante ha perdido su integración y no se puede recuperar, será necesario retirarlo y esperar un tiempo para que el hueso cicatrice antes de colocar uno nuevo.

Retirada y sustitucion del implante

En muchos casos, se puede regenerar el hueso con injertos y volver a colocar otro implante con garantías, una vez la zona esté sana.

✅ 4. Férulas de descarga en casos de bruxismo

Si la causa ha sido el bruxismo (apretar o rechinar los dientes), el tratamiento incluye el uso de una férula nocturna personalizada para proteger los implantes y evitar que vuelva a ocurrir.

En todos los casos, el éxito dependerá de actuar a tiempo y seguir las indicaciones del implantólogo. Por eso, ante cualquier sospecha, no dudes en consultarnos.

Prevención: cómo evitar que un implante se mueva

Una vez colocado un implante dental, la clave para que funcione durante muchos años está en el mantenimiento y en el seguimiento profesional.

Aunque los implantes son una solución segura y duradera, requieren ciertos cuidados para evitar complicaciones como la movilidad.

Aquí tienes los principales consejos para mantenerlos en perfecto estado:

1. Mantén una higiene oral rigurosa

Cepilla tus dientes (y la zona del implante) después de cada comida y utiliza herramientas específicas como:

  • Cepillos interdentales.
  • Hilo dental especial para implantes.
  • Irrigador bucal, si lo recomiendan en tu caso.

La higiene deficiente es una de las principales causas de periimplantitis.

2. Evita fumar

El tabaco afecta directamente al hueso y a la cicatrización. Los pacientes fumadores tienen más riesgo de pérdida ósea y fracaso del implante.

Si puedes reducir o dejar el hábito, tu salud bucal (y general) lo agradecerá.

3. Acude a tus revisiones periódicas

Es fundamental acudir al dentista al menos una o dos veces al año para revisar el estado del implante, el hueso y la encía. A veces, una revisión a tiempo evita un problema mayor.

4. Controla el bruxismo

Si rechinas los dientes al dormir, deberías usar una férula de descarga para proteger los implantes. El bruxismo puede generar microtraumatismos que acaban aflojando o dañando el implante con el tiempo.

5. Cuida lo que comes (al principio)

Justo después de colocar un implante, sigue las recomendaciones del dentista respecto a la dieta. Evitar alimentos duros o pegajosos los primeros días ayuda a que el implante cicatrice bien y se integre sin complicaciones.

Con estos hábitos, tus implantes pueden acompañarte toda la vida sin moverse ni darte problemas.

En nuestra clínica en Sevilla, contamos con la tecnología y la experiencia para diagnosticar la causa con precisión y darte una solución adaptada a tu caso.

Si te preocupa la movilidad de tu implante, no esperes más. Pide cita con nosotros y te ayudaremos a conservar tu sonrisa con total tranquilidad.